Número de Expediente 2905/03
N° | Origen | Tipo | Extracto |
---|---|---|---|
2905/03 | Senado De La Nación | Proyecto De Resolución | ARANCIO DE BELLER : PROYECTO DE RESOLUCION ADHIRIENDO A LA CONMEMORACION DEL DIA INTERNACIONAL PARA LA TOLERANCIA , A CELEBRARSE EL 16 DE NOVIEMBRE DE CADA AÑO . |
Listado de Autores |
---|
Arancio de Beller
, Lylia Mónica
|
Fechas en Dir. Mesa de Entradas
MESA DE ENTRADAS | DADO CUENTA | Nº DE D.A.E. |
---|---|---|
13-11-2003 | 19-11-2003 | 171/2003 Tipo: NORMAL |
Fecha de Ingreso a Dir. Gral. de Comisiones
DIR. GRAL. de COMISIONES | INGRESO DEL DICTAMEN A LA MESA DE ENTRADAS |
---|---|
14-11-2003 | 10-03-2004 |
Giros del Expediente a Comisiones
COMISIÓN | FECHA DE INGRESO | FECHA DE EGRESO |
---|---|---|
DE RELACIONES EXTERIORES Y CULTO
ORDEN DE GIRO: 1 |
17-11-2003 | 10-03-2004 |
ENVIADO AL ARCHIVO : 19-04-2004
Resoluciones
SENADO |
---|
FECHA DE SANCION: 18-03-2004 |
SANCION: APROBO |
COMENTARIO: SOBRE TABLAS |
APROBADO COMO: Proyecto de Declaracion |
NOTA:SE AP. UN PD.CONJ.S.2554,2573,2637,2931/03 C/DICT |
Órdenes del Día
NÚMERO | DE FECHA | ESTADO | ANEXO |
---|---|---|---|
3/04 | 16-03-2004 | APROBADA | Sin Anexo |
En proceso de carga
Senado de la Nación
Secretaría Parlamentaria
Dirección Publicaciones
(S-2905/03)
PROYECTO DE RESOLUCIÓN
El Senado de la Nación
RESUELVE
Adherir a la conmemoración del día Internacional para la
tolerancia, que se celebra el 16 de noviembre por iniciativa de la
UNESCO.
Mónica Arancio Beller.-
FUNDAMENTOS
Señor Presidente:
El 12 de diciembre de 1996, la Asamblea General de la Organización de
las Naciones Unidas invitó a los Estados Miembros a que el 16 de
noviembre de cada año observaran el Día Internacional para la
Tolerancia con actividades dirigidas tanto a los centros de enseñanza
como al público en general mediante la resolución 51/95.
Esta resolución se aprobó tras la celebración en 1995 del Año de las
Naciones Unidas para la Tolerancia, por iniciativa de la Conferencia
General de la UNESCO, en el transcurso del cual se realizó una campaña
mundial en favor de la tolerancia y la no-violencia. El Día
Internacional de la Tolerancia tuvo su origen en el impulso de ese Año.
El desarrollo de la tolerancia y la confianza en las diversas
comunidades no se logra de la noche a la mañana; es algo que requiere
tiempo y esfuerzos.
Establecer la tolerancia supone el acceso a la educación, ya que la
intolerancia suele tener sus raíces en la ignorancia y el temor: temor
a lo desconocido, al "otro", a otras culturas, religiones y naciones.
La intolerancia está también estrechamente ligada a un sentimiento
exacerbado de autoestima y orgullo, nociones enseñadas y aprendidas a
edad temprana. Por lo tanto, en los próximos años, nuestro país deberá
hacer más hincapié en educar a sus niños acerca de la tolerancia, los
derechos humanos y las libertades fundamentales.
Sin embargo, no debemos olvidar que la educación no termina en el aula,
y que los adultos -en primer lugar como personas capaces de cometer
actos de intolerancia, pero sobre todo en nuestra calidad de padres,
legisladores y encargados de la aplicación de la ley- también hemos de
estar entre los principales destinatarios de los esfuerzos educativos.
Un Día Internacional de la Tolerancia debe ser una ocasión anual de la
educación para la tolerancia, así como de reflexión y debates sociales
y políticos de mayor alcance sobre los problemas de intolerancia
locales y mundiales. Debe ser la oportunidad de hacer un balance de los
logros del año y de proponer nuevas políticas para colmar las lagunas
subsistentes.
La tolerancia es un compromiso activo y positivo con la diversidad
humana y es, por tanto, un principio clave de la democracia en nuestras
sociedades multiétnicas y multiculturales.
La intolerancia, en cambio, es una característica de la vida diaria y
se evidencia en acciones y actitudes que hieren con insensibilidad los
sentimientos, derechos y dignidad de los otros. Como personas, debemos
promover la causa de la tolerancia en nuestras vidas. Solamente
luchando contra la intolerancia y la exclusión desde abajo, podemos
anhelar superar este problema a escala mundial.
En este Día Internacional de la Tolerancia, decidámonos a practicar
activamente, a nivel individual, lo que desearíamos ver que se respete
universalmente. Reconozcamos que el trabajo de la tolerancia empieza
con cada uno de nosotros.
Por lo mismo, aprobemos el presente Proyecto de Resolución.
Mónica Arancio Beller.-
Secretaría Parlamentaria
Dirección Publicaciones
(S-2905/03)
PROYECTO DE RESOLUCIÓN
El Senado de la Nación
RESUELVE
Adherir a la conmemoración del día Internacional para la
tolerancia, que se celebra el 16 de noviembre por iniciativa de la
UNESCO.
Mónica Arancio Beller.-
FUNDAMENTOS
Señor Presidente:
El 12 de diciembre de 1996, la Asamblea General de la Organización de
las Naciones Unidas invitó a los Estados Miembros a que el 16 de
noviembre de cada año observaran el Día Internacional para la
Tolerancia con actividades dirigidas tanto a los centros de enseñanza
como al público en general mediante la resolución 51/95.
Esta resolución se aprobó tras la celebración en 1995 del Año de las
Naciones Unidas para la Tolerancia, por iniciativa de la Conferencia
General de la UNESCO, en el transcurso del cual se realizó una campaña
mundial en favor de la tolerancia y la no-violencia. El Día
Internacional de la Tolerancia tuvo su origen en el impulso de ese Año.
El desarrollo de la tolerancia y la confianza en las diversas
comunidades no se logra de la noche a la mañana; es algo que requiere
tiempo y esfuerzos.
Establecer la tolerancia supone el acceso a la educación, ya que la
intolerancia suele tener sus raíces en la ignorancia y el temor: temor
a lo desconocido, al "otro", a otras culturas, religiones y naciones.
La intolerancia está también estrechamente ligada a un sentimiento
exacerbado de autoestima y orgullo, nociones enseñadas y aprendidas a
edad temprana. Por lo tanto, en los próximos años, nuestro país deberá
hacer más hincapié en educar a sus niños acerca de la tolerancia, los
derechos humanos y las libertades fundamentales.
Sin embargo, no debemos olvidar que la educación no termina en el aula,
y que los adultos -en primer lugar como personas capaces de cometer
actos de intolerancia, pero sobre todo en nuestra calidad de padres,
legisladores y encargados de la aplicación de la ley- también hemos de
estar entre los principales destinatarios de los esfuerzos educativos.
Un Día Internacional de la Tolerancia debe ser una ocasión anual de la
educación para la tolerancia, así como de reflexión y debates sociales
y políticos de mayor alcance sobre los problemas de intolerancia
locales y mundiales. Debe ser la oportunidad de hacer un balance de los
logros del año y de proponer nuevas políticas para colmar las lagunas
subsistentes.
La tolerancia es un compromiso activo y positivo con la diversidad
humana y es, por tanto, un principio clave de la democracia en nuestras
sociedades multiétnicas y multiculturales.
La intolerancia, en cambio, es una característica de la vida diaria y
se evidencia en acciones y actitudes que hieren con insensibilidad los
sentimientos, derechos y dignidad de los otros. Como personas, debemos
promover la causa de la tolerancia en nuestras vidas. Solamente
luchando contra la intolerancia y la exclusión desde abajo, podemos
anhelar superar este problema a escala mundial.
En este Día Internacional de la Tolerancia, decidámonos a practicar
activamente, a nivel individual, lo que desearíamos ver que se respete
universalmente. Reconozcamos que el trabajo de la tolerancia empieza
con cada uno de nosotros.
Por lo mismo, aprobemos el presente Proyecto de Resolución.
Mónica Arancio Beller.-