Número de Expediente 2769/03

Origen Tipo Extracto
2769/03 Senado De La Nación Proyecto De Declaración FALCO : PROYECTO DE DECLARACION ADHIRIENDO A LA APROBACION DE LA CONVENCION CONTRA LA CORRUPCION .
Listado de Autores
Falco , Luis

Fechas en Dir. Mesa de Entradas

MESA DE ENTRADAS DADO CUENTA Nº DE D.A.E.
04-11-2003 05-11-2003 162/2003 Tipo: NORMAL

Fecha de Ingreso a Dir. Gral. de Comisiones

DIR. GRAL. de COMISIONES INGRESO DEL DICTAMEN A LA MESA DE ENTRADAS
05-11-2003 10-03-2004

Giros del Expediente a Comisiones

COMISIÓN FECHA DE INGRESO FECHA DE EGRESO
DE RELACIONES EXTERIORES Y CULTO
ORDEN DE GIRO: 1
05-11-2003 10-03-2004

ENVIADO AL ARCHIVO : 19-04-2004

Resoluciones

SENADO
FECHA DE SANCION: 18-03-2004
SANCION: APROBO
COMENTARIO: SOBRE TABLAS
NOTA:SE AP.UN PD. CONJ.S.2463 Y 2750/03 C/DICT

Órdenes del Día

NÚMERO DE FECHA ESTADO ANEXO
22/04 16-03-2004 APROBADA Sin Anexo
En proceso de carga
Senado de la Nación
Secretaría Parlamentaria
Dirección Publicaciones

(S-2769/03)

PROYECTO DE DECLARACIÓN

El Senado de la Nación,

DECLARA:

Que celebra la aprobación de la Convención contra la Corrupción por
parte de la Asamblea General de las Naciones Unidas el 31 de octubre de
2003.

Luis A. Falcó.-

FUNDAMENTOS

Señor presidente:

El pasado 31 de octubre la Asamblea General de las Naciones Unidas
aprobó, luego de dos años de arduas discusiones, el texto definitivo de
un tratado mundial anticorrupción denominado Convención contra la
Corrupción.

Entre los puntos centrales acordados por la Asamblea General, se
destacan: a) permitir que valores adquiridos de manera ilegal puedan
ser confiscados; b) que los actos que obstruyan el accionar de la
Justicia en casos de corrupción sean considerados hechos corruptos; c)
que los gobiernos dicten sus propios reglamentos anticorrupción; d) una
exhortación a los países miembros para que se asistan y cooperen
recíprocamente para impedir, investigar y juzgar actos de corrupción y
a sus responsables.

Coincidimos plenamente con los argumentos centrales esgrimidos por Kofi
Annan, Secretario General de las Naciones Unidas al presentar
formalmente el documento. Dijo el titular del organismo, al referirse a
la corrupción como a una plaga perniciosa, que la misma "mina la
democracia y el imperio de la ley, conduce a la violación de los
derechos humanos, distorsiona los mercados, erosiona la calidad de vida
y permite el florecimiento del crimen organizado, el terrorismo y otras
amenazas a la humanidad".

Para Annan, la adopción de la Convención constituye un gran logro e
instó a que, a la luz del "consenso obtenido, ratifiquemos la
Convención lo más pronto posible" ya que, "una vez vigente, este nuevo
instrumento puede hacer una diferencia real en la calidad de vida de
millones de personas en todo el mundo".

Quienes integramos este Cuerpo y entendemos que toda práctica corrupta
debe ser erradicada, celebramos con entusiasmo este auspicioso hecho
que señala el camino a seguir a nivel mundial.

Para atacar estructuralmente a la corrupción no sólo hace falta el
esfuerzo individual de cada gobierno sino también la activa
cooperación, basada en el compromiso solidario y concertado, del
conjunto de las naciones.

A este tipo de esfuerzo ha llamado el Señor Kofi Annan y ha convocado
la Organización de las Naciones Unidas.

Si la vocación del gobierno argentino se inscribe claramente en pro del
desarrollo de medidas que reduzcan notablemente los márgenes de acción
a los corruptos y en pos de la transparencia de las acciones de
gobierno, es menester que nuestro país suscriba este documento sin
dilaciones.

Si bien la fría letra de esta Convención no bastará por sí misma para
disminuir el influjo de semejante lacra, su aprobación, en base a un
gran consenso, implica un punto de partida en absoluto despreciable.

Todo lo contrario: la Argentina debe sumarse al concierto de las
naciones que más enérgicamente tiendan a hacer operativa su letra con
el compromiso efectivo de su gestión gubernamental.

Por estas razones y solicitando a los señores senadores que acompañen
con su voto afirmativo a este proyecto, celebramos la aprobación de
este trascendental documento.

Luis A. Falcó.-